En la reproducción tecnificada e intensiva como se practica actualmente la porcicultura se debe evaluar el comportamiento de la población total del hato reproductor y no en forma individual, de esta forma podremos tener una mejor visión de la productividad y de los principales indicadores clave.

Para que se cumplan los objetivos y metas establecidas de productividad, un elemento muy importante es la estructura de la paridad del hato reproductor de la granja.

¿Qué es la estructura de paridad?

No es más que la distribución de las cerdas por categorías de numero de parto, es decir cuantas cerdas tenemos de parto1, cuantas de parto2, cuantas de parto 3 y así sucesivamente, expresado en valores relativos.

Existen 3 factores que alteran el equilibrio de la paridad:

  • La mortalidad
  • La tasa de descarte o desecho
  • La tasa de reposición o de reemplazo

La estructura de la paridad tiene especial influencia tanto en el desempeño técnico reproductivo de la granja, así como en el desempeño económico.

1.  ESTRUCTURA DE PARIDAD IDEAL

La paridad promedio ideal de la granja debe estar en valores de 2.8 a 3.5 partos, sin embargo, debemos profundizar en la distribución por número de parto. A continuación, muestro de forma gráfica la distribución ideal de la paridad de las cerdas reproductoras.

Como se puede observar en la gráfica anterior el 44% de las cerdas son de parto 1 y parto 2 y más del 50% están entre parto 3 y parto 6 con esta distribución la probabilidad de estabilidad sanitaria, de alta productividad y de buen desempeño económico es predecible.

A continuación, puedo ilustrar en un ejemplo gráfico un desequilibrio en la estructura en la paridad con una marcada tendencia a un hato envejecido.

En el ejemplo anterior podemos observar que más del 70% de las cerdas están de parto 4 a más. Esta estructura pone en riesgo la productividad de la granja y puede tener un impacto negativo en la rentabilidad en el corto y mediano plazo dado que, si permitimos que el hato reproductor envejezca, la renovación lleva un tiempo establecido que no podemos apresurar.

Así mismo si la estructura de hato tiene una tendencia marcada hacia un hato muy joven también es contraproducente ya que se puede ver comprometida y en riesgo la salud en general de la granja dado que se da un desequilibrio en la inmunidad tanto de las reproductoras como de la progenie.

En la gráfica anterior se puede ejemplificar la estructura de paridad de un hato muy joven ya que el 60% de la población de cerdas reproductoras es de parto 1 y parto 2.

2  Factores que afectan la estructura de paridad

Tenemos claramente identificados 3 factores que alteran el equilibrio en la estructura de paridad de la granja reproductora.

  • Políticas de descarte o eliminación
  • Disponibilidad de cerdas de reemplazo (tasa de reemplazo)
  • Manejo y cuidado de las cerdas reproductoras

Para efectos de este articulo analizaremos el primer factor. La política de descarte o eliminación de cerdas debe estar claramente establecido por escrito y todo el personal involucrado debe tener pleno y absoluto conocimiento de dichas políticas.

Para el descarte o eliminación de cerdas tenemos dos criterios

  • Descarte programado
  • Descarte no programado

2.1   Descarte Programado

El final de cada ciclo reproductivo se da en el momento que destetamos un lote o grupo de cerdas para iniciar un nuevo ciclo, es en este momento donde debemos hacer una revisión detallada de cada cerda del grupo para identificar y cuantificar las cerdas que serán removidas de la granja, los criterios a aplicar en este punto son:

  • Edad de la cerda
  • Historial productivo
  • Estado de salud de la cerda
  • Capacidad reproductiva para un nuevo ciclo

2.2  Descarte No Programado

En este caso debemos estar haciendo revisiones permanentes y constantes para identificar cerdas problemáticas que deberán ser removidas del hato reproductor de forma inmediata.

  • Cerdas repetidoras
  • Cerdas abortadas
  • Cerdas con descarga vaginales
  • Cerdas con cojera severa
  • Cerdas primerizas o multíparas en anestro
  • Cerdas con baja condición corporal
  • Cerdas enfermas sin respuesta satisfactoria a previo tratamiento
  • Cerdas con acumulación de días no productivos

La remoción oportuna de cerdas que ya no aportan valor a los interese y objetivos de la granja debe ser una prioridad, para ello debemos tener un mercado establecido para esta categoría de cerdas de esta forma evitamos que las cerdas pasen en las instalaciones de la granja más tiempo del estrictamente necesario, de no removerlas oportunamente estarán acumulando días no productivos y se convertirán en una carga y un gasto para la granja.

En un próximo artículo veremos en detalle los otros factores que interviene en la estructura de paridad como lo son la tasa de reemplazo y el cuidado y manejo de las cerdas reproductoras